Gutiérrez Girardot, R. Sobre la crítica y su carencia en las Españas, en “Provocaciones”. Santafé de Bogotá: Editorial Ariel, S.A, pp, 28-53. Angela Murillo - Catalina Monsalve

Universidad Nacional de Colombia

Asignatura Problemática Social Colombiana

Estudiantes Catalina Monsalve Arango y Angela M. Murillo Hernández

                                                         19 de abril de 2016      

RESEÑA
Gutiérrez Girardot, R. Sobre la crítica y su carencia en las Españas, en “Provocaciones”. Santafé de Bogotá: Editorial Ariel, S.A, pp, 28-53.
“De esta manera, la simulación se ha convertido en elemento vital de la vida intelectual de las Españas; no es la excepción, sino generalmente la regla. Y en este elemento vital de la simulación no cabe la crítica, sino el dogma, que a su vez posibilita el rastacuerismo y lo alimenta.” (pp 45).

Las Españas, aunque siguen siendo un fuerte centro católico, fueron guiadas de una manera mucho más fuerte por su tradición religiosa hasta poco después de la mitad del siglo XX, lo cual, hizo que se atrasaran con respecto al resto del continente en ámbitos económicos, políticos, educacionales y culturales, lo que hizo que también se diera un retraso a nivel intelectual y de estilo de vida, marcando así un importante estancamiento en su historia. Su religión impidió su paso a la modernidad debido a que la veía como algo malo por el simple hecho de ser moderno, así mismo, debido a las profundas influencias que tenía el catolicismo distribuidas en toda la población, impidió su avance intelectual al paralizarla en los dogmas de la historia hispana (distintos de los dogmas filosóficos); dichos dogmas hundían a los habitantes de estas Españas cada vez más en el rastacuerismo cultural y de pensamiento en el que, de por sí, ya estaban inmersos.

Recordemos, que al mencionar a “las Españas” estamos hablando tanto del país español en sí mismo como de las colonias españolas, por tanto, debido a nuestra herencia católica, adquirida por medio de la conquista española, los colombianos estamos incluidos allí, nosotros también hemos tenido actitudes rastacueristas, es decir, tendencias a aparentar lo que realmente no somos o tenemos. A nosotros también nos cegó e incluso, tal vez, se nos manipuló en nombre de la religión tomando el poder de nuestro pensamiento y dejándonos sin aparente escape al llegar a la educación formal (desde la educación básica hasta la universidad). Sin embargo, afortunadamente en la actualidad, finalmente la secularización se infunde cada vez más en nosotros y no solo se queda en quienes llamamos ilustrados; esta secularización nos “abre los ojos” y nos deja “libres” a la ilustración kantiana, comenzamos a conocer lo que es pensar por nosotros mismos y el arte de la crítica.

Preguntas:
1. En medio de un ambiente tan católico como el de la sociedad colombiana, ¿Cómo fue posible que en la Universidad Nacional de Colombia se desarrollara el pensamiento crítico?
2. ¿El rastacuerismo aún sigue presente en nuestro ámbito intelectual? De no ser así ¿cómo se logró dejarlo atrás? ¿Tiene alguna relación con la secularización?